Para que nuestros niños crezcan de manera adecuada intervienen diversos factores de tipo genético, ambiental, nutricional y hormonal; en muchas ocasiones un retraso en el crecimiento puede ser la primera manifestación de otras enfermedades.
Una valoración temprana del adecuado patrón de crecimiento en sus hijos será la clave para el éxito del diagnóstica de la causa y el tratamiento adecuado.
Se recomienda llevar buenos hábitos de alimentación y sueño en los niños y adolescentes para prevenir alteraciones en el crecimiento, sin embargo, es necesario una evaluación al menos anual de estos parámetros.